…El olivar
ha jugado,
a seducirme.
Y por el aliento,
de su boca,
vino entero
lleno de aceite.
Las golondrinas
como barcas,
en una bahía.
Todas juntas
en algarabía,
hacían nidos
en tu ausencia.
Laminas de ti,
entre la hoguera.
Uvas aún verdes,
otras maduras afuera.
Este paraguas
que llevé,
aún huele tuyo.
Mío, me lo quitaste
y lloró nácar.
Al encerrarse
con el panal,
de mis suspiros dentro
en cada celdilla…
“Este paraguas que llevé aún huele tuyo”. Los sentidos nos juegan esas pasadas.
ResponderEliminarQuería agradecerte José Ramón que me felicitaras por el premio que recibí. Es un honor viniendo de ti.
¡Un fuerte abrazo y a disfrutar del puente!
impoble entrar a tu blog
ResponderEliminarbueno por fin me alegra tu mejoria
besos
MARINA
La vida es bella, la película bella, la música bella, tu poesía bella...hoy todo está en armonía.
ResponderEliminarUn abrazo