…Aún,
hay palcos
opacos.
Donde estuve,
te tuve
y retuve.
Pegado a mí,
como chincheta.
Al pieglo
antes de alegría
y hoy tan solo
vena de agua
perdida.
Que corre
contra las vidrieras,
del autocar.
En plena tormenta,
donde dentro
viéndote fuera.
Y en la nada,
del todo
poco puedo:
por ti remediar…
Jose Ramón!!
ResponderEliminarUn placer leerte y recoger emociones a través de tus palabras.
Saludos y seguiré por estos lares para disfrutar de tu blog.
Y...yo aquí como un clavo.Me alegra que hayas visto tan de cerca la Catedral de León... tanto que yo jugué y corrí por el atrio al slir del colegio de Las Carmeitas que esta en la cale de al lado "calle
ResponderEliminarGuzman el Bueno" yo naci en esa calle hace añosssss.
gracias por tenerme alli a tu lado tu a mio estuviste tambien.
un abrazo
Marina