…he ido, a anclar
al fin del mundo.
Donde los maullidos
del agua,
engullen al visitante.
Y te dejan pernoctar,
al anotarte
muy pequeño.
Por eso ahora,
para todos vosotros /as
mi tierno ciempiés:
¡mies del alma¡
envueltos por el viento,
como una cigüeña.
Que revuelve
la torre del nido,
traspuesta de latidos
y olas de marina.
En el hondo coral,
cuando toquéis
su timbre.
Mimbre de plata,
al retomar las alas
en vuestra compañía.
De nuevo en mí,
y yo con todos /as
dentro ya sin más.
Como cruz de fuego,
fecundareis el desandar.
De este aprendiz errante,
al teneros consigo
en el cielo suyo.
Con candilejas
de mariposa,
dispuestas para cantar…
Buenos dias...me gustaron tus palabras en estos versos que nos dedicas en tu post,muy bellas y de mucha ternura y no te hago más elogios ya que lo ven muchas personas,ya ves que siepre escribo donde no haya nadie...pero...
ResponderEliminarUn beso para ti.
MARINA
Hola ¿que tal el descanso ?tienes
ResponderEliminarmusica muy bonita
Como siempre te espero
besos
Marina